jueves, 19 de mayo de 2011

LOS NINI MEXICANOS




nini




ni estudian ni trabajan




¿Que son los jovenes ninis?

México, DF.- En México son 7 o más millones, y en el mundo suman muchos más los jóvenes que no tienen un futuro o, si cuentan con él, éste es desesperanzador, desolador y penoso. Es una generación marcada por la desilusión a la que se denomina los “Ninis”, precedida por los “Emos” y la generación “X”.

La primera vez que supe que así les llamaban a los jóvenes de esta época, fue en una entrevista que dio el rector de la UNAM, José Narro Robles. Dijo que eran 7 millones de jóvenes que ni estudian ni trabajan en el país. Son los “Ninis”.

Hasta entonces supe el nombre de estos jóvenes que he visto en muchas ciudades, deambulando en las calles sin ilusión ni compromiso, que ni estudian ni trabajan, que nada les llama la atención y todo lo desestiman.

Desde hace una década o más me percate de su existencia por primera vez, pero no sabia cómo llamarlos. Apáticos, oí que decían que nadie los entendía pero tampoco les interesaba entender lo que pasaba y les pasaba. Total, se sentían protegidos sólo por la familia.

Más recientemente en algunas familias de clase media, aun aquellas favorecidas por un negocio pasajero o un empleo más o menos remunerado, los volví a ver en las universidades públicas y privadas.

Con techo, comida y vestido seguros, muchos de estos jóvenes decidieron quedarse en la escuela, tomar algún diplomado, otra carrera o seguir la maestría y luego el doctorado, con tal de no salir a la calle a enfrentar un futuro laboral incierto e inseguro.

La pregunta clásica de los padres “¿Qué quieres ser, qué quieres hacer?”, la diluían con la simple respuesta de “sigo estudiando” con un gesto de desánimo que es su preferido.

Ahora muchos de estos “Ninis” van caminando por las calles de las ciudades de todo el mundo, sin trabajo y sin cumplir con el sueño que nos vendieron hace varias décadas, esa ilusión que nos repitieron durante años de que si lograbas tener educación superior, entonces podrías conseguir trabajo seguro y bien remunerado, ascender en la clase social y económica, tener casa, auto y dinero. Es decir, la vida resuelta.

Pero nada de esto resultó, la promesa nunca se cumplió.

Al contrario, no hay empleo seguro y, cuando existe, es bajo contratos efímeros, de unos cuantos meses, para no generar ninguna responsabilidad social por parte de los empresarios.

En esta realidad el Estado ha abandonado su responsabilidad de asegurar el bienestar social al ceder a la iniciativa privada servicios de salud, agua, basura, educación y hasta la seguridad.

La situación para los “Ninis” en países como México se agrava aún más porque además del desempleo prevalece una ausencia de política económica de carácter social y en un lustro la pirámide demográfica iniciará una transformación hasta que en unas décadas se invierta y, para entonces, habrá más jóvenes sin perspectivas de mejoramiento de empleo o educación.

El exdirector del Politécnico, José Enrique Villa, y el actual rector de la UNAM, José Narro, han advertido –sin que les hagan mucho caso los políticos y la cúpula gobernante– de los riesgos de no aprovechar este “bono demográfico”.

Han dicho que si se desperdicia este fenómeno social que muy pocas veces se presenta en un país, que es tener una población mayoritariamente joven, con amplias posibilidades para transformar una sociedad, se podrían generar disturbios sociales.

De no aprovechar en su momento a esta población en edad productiva, habrá una población inconforme y demandante de servicios pero sin instituciones capaces de responder a las necesidades básicas de seguridad y bienestar.

De hecho, esto ya está ocurriendo. Cada año las instituciones de educación superior rechazan a unos 200 mil jóvenes solamente en al área urbana de la Ciudad de México, y otros 100 mil a escala nacional.

Mientras que la tasa de desempleo el año pasado fue de más de 3 millones y la del subempleo de más de 4 millones. Esto es, más de 7 millones de mexicanos sin ocupación permanente.

Sin posibilidad de empleo y sin estudios que representen una verdadera esperanza de mejoramiento personal, el futuro de los jóvenes mexicanos se encamina hacia otros caminos: la delincuencia organizada, la migración a Estados Unidos y Canadá, el subempleo o el trabajo informal.

Cualquiera de estos caminos, más que una opción, representa una falsa vía de desahogo ante una demanda social incontenible que irá creciendo ante la incapacidad de opciones reales de satisfactores sociales y laborales.

El país se encuentra frente a un reto mayor, transformar una generación de jóvenes decepcionados, desesperanzados, producto de un proyecto que llegó con el nombre de Consenso de Washington hacia finales de los años ochenta, y que dictó las políticas neoliberales que hoy siguen imperando en América Latina, principalmente.

Los “Ninis” y la situación de crisis en la que viven son producto de este modelo económico que México adoptó desde el gobierno de Carlos Salinas de Gortari y que Vicente Fox y Felipe Calderón han mantenido generando una generación marcada por el desaliento y la desolación.

cosas del
del periodista

José Gil Olmos / EsMas


ok.

¿Que son los jovenes ninis?





viernes, 29 de abril de 2011

cosas obsesivas


Que locura es la obsesión, que desgastante debe ser aferrarse a algo por capricho, por testarudez, por necedad.

Todo tiene su tiempo en esta vida, alguna vez tuvimos nuestra oportunidad y si no la supimos manejar podemos perder lo que no queríamos perder, no siempre logramos tener una segunda oportunidad y quedamos con una sensación de vacío y desasosiego que no nos permite estar en paz.

Llega un momento en que se convierte en algo enfermizo, las cosas se salen de control y ya no somos capaces de pensar con claridad, actuamos de manera incongruente y no somos capaces de ver que tan ridículo es nuestro proceder, la vida deja de tener color porque estamos tan ensimismados en esa obsesión que no vemos más allá de eso, permanecemos en un circulo vicioso que cada vez se cierra mas y llegamos a limites insospechados y cometemos acciones que nunca nos creímos capaces de hacer.

Hasta el sol de hoy no creo haberme obsesionado con nada, he tratado de mantener lucidez en mis ideas y en mis acciones, es difícil, muy difícil, porque hay cosas que uno ama con toda su alma y uno quiere aferrarse a ese amor con todas sus fuerzas pero debemos analizar las posibilidades, las realidades, las circunstancias, los hechos, los pros y los contras y actuar conforme a lo que es viable y lo que no, amar a alguien no nos convierte en sus dueños, no pasan a ser propiedad privada por el hecho de interesarnos, no tenemos exclusividad, debemos entender que cada persona es individual y libre ante todo, el amor no se condiciona, solo se ama o no se ama.

Yo no tengo una obsesión, he sido motivo de obsesión, obsesión de mantenerme como un objeto inanimado por parte de mi ex, obsesión por odiarme con todas mis fuerzas por ser tan loca, obsesión de un adolescente de que le diga que si algún día, obsesión de quienes entran a mi blog a decirme resentida, obsesión de un tipo que jura que destruirá mi vida, en fin, solo me falta ser obsesión de un perro que me quiera orinar cada día, es mejor ser obsesión que ser obsesivo, bueno chauo

viernes, 11 de marzo de 2011

El Molinito Naucalpan de Juárez, estado de Mexico


despues de leer unos articulos de naucalpan, claro ya se los puse , aqui pongo una foto y explicacion mias. les explico


Aqui es el cruce para ir a San Bartolo, el centro de Naucalpan,


o para ir al Toreo de cuatro caminos viniendo de las colonias

Benito Juarez , Lomas del Cadete, Las Granjas, La Tolva,

El centenario, el Chamizal, San Antonio incluso de la Mancha

o Rio Hondo.

Enfrente se encuentran las tradicionales rostizerias,

zapaterias, el mercado, y las infaltables cantinas del rumbo.

en este sitio construiran el distribuidor vial, pero nadie

sabe aun como son los planos.


LA REPORTERITA